Roberto Delman llego a su casa cansado con deseos de ver a su esposa y a sus dos hijas, seres a los que ama entranablemente. Roberto confiaba total y plenamente todas las finanzas, sus cuentas de banco, ahorros y propiedades en su esposa Elena, hasta que un dia, al regresar de viaje, encontro que su casa no era de el y su esposa estaba desaparecida..."